Me estoy volviendo café

only the best on line. Wellcome to my space

Quererte en un tanto complicado, o tal vez la complicada soy yo…

Algunas veces quiero pensar que la costumbre ha precedido mis sentidos y se ha convertido en la razón de mis motivos… pero cuando por alguna razón mi mente esta a un paso de racionalizarlo y de tragarme ese cuento me digo ha mi misma - ¿y sí esto es costumbre, cómo demonios se siente el amor? - o mejor dicho – sí así duele la costumbre ¿Cómo dolerá el amor? Y es justo en ese momento en que de verdad me siento café, pero no cualquier café, me siento un simple y miserable café de máquina de 5 peso, y no es el precio lo que me hace despreciable sino el simple hecho de ser un café: insípido, amargo y dejándolo al asar y con un toque de suerte: Mas o menos bueno…

Y es que el café de maquina no es malo, por si sólo, depende del proveedor, así mismo del lugar, la situación, el momento… no es lo mismo tomarse un café sémicaliente cuando una tormenta ha mojado hasta tu alma, que tomarse un café buscando el mero placer de tomar café … recuerdo que en la facultad un café de maquina me resultaba el pretexto perfecto para fumarme un cigarro y salirme de la clase, también representaba el yuyu con k para que dejara de hacer corajes; por otra parte el café de maquina cuando iba al servicio representaba mi flojera de caminar 20 metros mas para llegar a la cafetería o simplemente personificaba mi incapacidad financiera para comprar un café de 15 pesos, por que seguro era fin de quincena… en fin lo que sucede es que por ahora me siento un café de maquina contigo… y tal vez, simplemente tal vez pase un buen tiempo en el que yo me vuelva a convertir en ese café que solíamos tomar por la mañana…

Extraño, extrañar, las cosas que mas extrañaba de ti, y el hecho es que: si te tuviese a mi lado el café de la mañana simplemente no seria un placer sino el martirio de un estomago con gastritis… y aún con eso, te extraño porque lo más extraño de no extrañarte es no poder deja de pensarte…