Extrañandote

only the best on line. Wellcome to my space
Toda la semana he estado enferma, toda la semana la he estado extrañando, estoy afonica, el asma me aturde y la fiebre me da alucinaciones. T extraño tanto y ayer ...

Ayer soñé que llagabas. Te ponías ha gritabas como es tu costumbre, porque habías encontrado todo un desorden en casa, como siempre te enojabas por que dice “siempre es lo mismo” es normal en ti, te enojas con facilidad, odias el desorden, mí desorden.

Entre gritos y regaños, tomabas los utensilios de limpieza y te ponías hacer el quehacer, mientras yo cruzaba aquella puerta con la que me despedía día tras día de ti, tu te quedabas sola, en esa sala en la que guardo mi soledad y mis tristeza, mis gritos, mi llanto, mi alegría y horas de desvelo junto a mis amigas o frente a la computadora.

Después de dejar la casa lustrosa y limpia como un hospital en plena cirugía, te acostabas en aquella cama dura, que siento debemos de cambiar, te ponías ha leer tus libros, esos que lees y relees para entender mejor, sacabas tus marca textos y marcabas cada palabra, cada frase que te parecí útil. Hacías eso hasta que te quedabas dormida, profundamente dormida, con las manos lisas de tanta agua que tocaron tus manos, brillazas por haberme cocinado y esas canas que se te notas más desde que te teñiste el cabello de rojo son el reflejo de tu larga vida.

Con tu mano bajo tu rostro duermes con una paz de un bebe, con el suspiro de la furia del viento en otoño y con tu seño fruncido como si pelearas en sueños.

Si supieras cuanta paz me da verte dormida. El eco de tus gritos por las mañana se ha desvanecido, ahora sólo queda esa nota sobre la mesa, con esas letras inconfundibles, de patas de araña, como dijeras tú misma, el plato en medio del comedor, con mi comida favorita, que diferente es llegar a casa y sentir esa paz que no siento cuando no estas, esa furia que causas estando ha mi lado, esas ganas de decirte que te vallas por que no puedo ser yo misma y a la vez esa ganas de aprisionarte a mi lado y no dejarte ir de mi, desear que nos quedemos ahí , en esa cama dura abrazadas viendo televisión o alguna película que esta vez se te antojo ver, con tu preguntas más que absurdas, sobre si el personaje principal se va morir o la mujer es mala? Y yo con mi poca paciencia que te tengo solo te digo- ve la película y no me preguntes- tu con tu histeria te paras de la cama por una taza de café y te sientas sola en aquella inmensa soledad de la sala, ahí estas, con tu rostro clavado en esa taza de café y tu mente en tu verdadera casa, ahí donde diariamente empiezas tus días después de las 10 de la mañana, no se que imaginaras, abecés eres tan compleja, que nunca logro entenderte, eres impredecible, jamás se como vas reaccionara.

Yo te dijo rojo, tu dice azul, si digo sí, tu dice no, siempre, siempre llevándome la contraria. Pero todo fue un sueño, un vil y cruel sueño, ni tus gritos, ni tu presencia, ni la casa limpia fueron verdad, tu no esta mi lado, ni yo al tuyo, seguramente esperare tu llamada por la noche, preocupada por saber como me fue en el día… pero justo cuando pienso en todo ese tiempo que tendrá que pasar para escucharte, me suelto ha llorar con un llanto tan profundo, tan sentido, como el de una niña que ha perdido a su madre en el supermercado, lloro y lloro, con aquel llanto que me corta el aliento, que me inunda de paz y de tristeza a la vez. Esa tristeza que siento aún sabiendo que tienes a la persona, pero no estas a su lado, tengo que confesarte que nunca te había extrañado así…

Tengo día pensado en ti, quiero que vengas casa, te juro que haré lo posible por tenerte paciencia, por sentarme a tu lado a tomar café, por comer por la noche aún si ya comí, te juro me dedicare a ti, solo a ti. Te extraño tanto, no tienes idea como, me siento sola y de alguna manera haber soñado contigo me ha hecho sentir más sola, te he marcado 3 veces, ninguna has contestado seguro estas trabajando o con tu amigas en el café.

Hace tanto tiempo que me olvide, de lo lindo que era escribir para ti. Te acuerdas? Cuando te hacia cartas, cada cumpleaños, cada festival, cada que me antojaba, no se que paso, tal vez crecí demasiado rápido y mis prioridades empezaron ha cambiar, me dedique a estudiara, al trabajo, a lo amigos, a mi y me olvide de lo mucho que te necesito, que te extraño, que te quiero… Se que nunca leerás esto, se también que tal vez nunca tenga el valor de decírtelo a la cara, por que tal vez cuando te vea este sentimiento ya haya pasado. Pero si un día este mensaje llega a tus manos, quiero que sepas, que no estoy triste por nada, es simplemente que esta ciudad, esta lluvia esa señora tirada en medio del metro, me hizo acordarme de ti, me da tanto miedo perderte, me da tanto miedo ya no sentirte. Se que no me arrepiento de nada, se que todo lo que no ha pasado ha sido producto de la circunstancias, de nuestro crecimiento, tal vez hayan muchos motivos, pero jamás encontrare uno para haberte dicho un día, cuando me moría del coraje, “que no quería que fueras mi madre, que me avergonzaba de ti, que no te quería” se que eso fue hace tanto tiempo, pero mis pensamientos están tan llenos del presente, que mi orgullo no me deja perdonarme. Y no es verdad que yo me sienta avergonzada, son nuestra almas, tan igual tan parecidas, esperare pacientemente aquí sentada, te quiero tanto mamá…
Tu hija.